A más de un año del megaincendio en la región de Valparaíso, damnificados de la población Manuel Bustos en Viña del Mar han iniciado una nueva huelga de hambre en protesta por la falta de soluciones habitacionales. Pese a las promesas de las autoridades, la reconstrucción avanza a un ritmo exiguo, lo que ha generado indignación y desesperación en las familias afectadas. Dos manifestantes han advertido que, de no recibir respuestas concretas, podrían incluso coserse la boca como medida extrema de presión.
Puntos Claves:
- Nueva huelga de hambre por damnificados del megaincendio: La protesta comenzó la noche del viernes en la Plaza de la Cultura de Viña del Mar, con dos personas instaladas en carpas exigiendo respuestas del gobierno.
- Crisis humanitaria prolongada: A más de un año de la tragedia, cientos de familias siguen sin soluciones habitacionales, sin títulos de dominio y sin acceso a subsidios prometidos.
- Radicalización de la protesta: Elizabeth Valenzuela, vocera de los damnificados, advirtió que los huelguistas podrían «coserse la boca» si no reciben respuestas concretas por parte del Ejecutivo.
- Gobierno minimiza críticas y defiende su gestión: La ministra de Desarrollo Social, Javiera Toro, aseguró que el Plan de Reconstrucción avanza en un 26%, una cifra que se ha repetido durante meses sin cambios significativos.
- Cuestionamientos al gerente técnico de la reconstrucción: Patricio Coronado, encargado del proceso, recibe un sueldo de 7 millones de pesos mensuales, mientras los damnificados siguen sin vivienda ni apoyo efectivo.
- Rechazo a la autocomplacencia del Ejecutivo: Organizaciones y damnificados denuncian que el gobierno carece de autocrítica y que las medidas implementadas no han tenido impacto real en quienes perdieron todo en la tragedia.
- Movilizaciones anteriores sin resultados concretos: Esta es la tercera huelga de hambre que realizan los damnificados en menos de un año, luego de que las dos anteriores se extendieran por 10 días sin lograr soluciones definitivas.
- Exigencias concretas en el petitorio: Los damnificados demandan la entrega inmediata de títulos de dominio, agilización de subsidios habitacionales y asignación de bonos para las familias afectadas. Además, exigen la entrega de 10 cupos laborales para ayudar a la reactivación de los damnificados.
Las familias afectadas han dejado claro que su paciencia se agotó y que no cesarán las manifestaciones hasta obtener respuestas concretas. Mientras tanto, el gobierno sigue destacando avances que, en la práctica, no se traducen en soluciones reales para quienes perdieron todo en la tragedia.