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Millonarios sueldos y solo un 1% de avance: grave cuestionamiento al equipo de reconstrucción tras incendio en Viña, Quilpué y Villa Alemana

Ilustración políticos lucrando con reconstrucción Imagen generada con IA. Click para ampliar T
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A más de un año del megaincendio que arrasó con miles de viviendas en la región de Valparaíso, el proceso de reconstrucción liderado por el Ministerio de Desarrollo Social enfrenta duras críticas. Pese a los millonarios sueldos del equipo técnico encabezado por Patricio Coronado, el avance en la construcción de viviendas es mínimo, lo que ha provocado la indignación de parlamentarios, autoridades locales y organizaciones de damnificados.

Puntos Claves:

  • Alto costo del equipo técnico liderado por Patricio Coronado: El administrador público Patricio Coronado encabeza el equipo de reconstrucción con un sueldo mensual de más de $7 millones. Según reportes de Transparencia Activa y medios locales, su equipo estaría compuesto por al menos nueve personas que, en conjunto, reciben más de $30 millones al mes. Algunos de los sueldos destacados son:
    • Eliana Díaz, periodista: $3 millones.
    • Andrés Tampe, sociólogo: $2.900.000.
    • Tomás Volenski, psicólogo: $3 millones.
    • Pablo Álvarez, cientista político y exfuncionario municipal: $2.300.000. entre otros
      Según Transparencia Activa del Ministerio de Desarrollo Social, este grupo tiene como misión coordinar y asesorar técnicamente la implementación del Plan de Reconstrucción, lo que es bastante vago para justificar 30 millones mensuales.
  • Informe de Contraloría revela graves falencias: Un reciente informe de la Contraloría General de la República reveló que, hasta el 3 de marzo de 2025, solo se han construido 40 viviendas de las más de 3.500 necesarias tras el incendio del 2 y 3 de febrero de 2024. El documento advierte que el 83,36% de las familias damnificadas aún no cuenta con subsidio habitacional o no ha podido iniciar obras pese a tener uno asignado.
  • Solo el 1,14% de las familias damnificadas habita una vivienda reconstruida: El informe de Contraloría también señala que solo el 15,50% de las familias ha comenzado la ejecución de sus viviendas, y un ínfimo 1,14% ya las habita. Además, se cuestiona que cerca del 90% de los subsidios entregados no se encuentra asociado a proyectos concretos, lo que ha sido calificado como una “reconstrucción de papel”.
  • Cuestionamientos desde el Congreso y autoridades regionales: Parlamentarios como Camila Flores (RN) y Tomás Lagomarsino (PR) criticaron los sueldos del equipo técnico, considerándolos desproporcionados respecto al bajo grado de avance. El gobernador regional Rodrigo Mundaca también apuntó a la falta de coordinación: “Que en la práctica de coordinador, no ha habido ninguna coordinación (…) ¿qué han hecho en materia de reconstrucción?”, cuestionó.
  • Respuestas y defensa de Patricio Coronado: Tras semanas sin entregar declaraciones, Coronado señaló que su equipo está conformado por cinco personas que trabajan exclusivamente en la reconstrucción, con remuneraciones que sumarían $18 millones brutos. Afirmó que el equipo realiza trabajo en terreno y seguimiento permanente, desmarcándose de los datos expuestos en el portal de Transparencia Activa.
  • Organizaciones de damnificados exigen resultados concretos: Desde la ONG Sobrevivientes del Megaincendio, su secretario Michael Sasso expresó que no se cuestionan los sueldos en sí, sino la idoneidad del equipo y la falta de avances reales. “El equipo técnico no ha estado a la altura de esta tragedia (…) ¿serán los más idóneos para este proceso? Nuestra mirada dice que no lo son (…)”, afirmó.
  • Críticas a sobreprecios y falta de fiscalización: René Flores, director del Eje de Reconstrucción del Comité de Crisis de El Olivar, agregó que hay indicios de que no se cumplieron los protocolos establecidos en los contratos, señalando posibles sobreprecios y mala gestión por parte del equipo técnico.

El malestar crece entre los afectados por el megaincendio de Valparaíso, quienes aún enfrentan condiciones precarias mientras la burocracia y los altos sueldos del equipo encargado de reconstruir siguen generando desconfianza. La ausencia de resultados concretos, sumada a la falta de transparencia y rendición de cuentas, ha transformado este proceso en un nuevo foco de crítica ciudadana. Las familias damnificadas esperan acciones efectivas y no promesas en papel.