Roban 18 Computadores desde la Subsecretaría de Educación Superior en Santiago

Un robo que revela aparentes debilidades en la seguridad institucional ocurrió este jueves en las oficinas de la Subsecretaría de Educación Superior, ubicadas en el edificio Santiago Downtown, en pleno centro de Santiago. La facilidad con la que se llevó a cabo el delito, y el hecho de que no se detectaran señales de fuerza, plantea interrogantes graves sobre acceso privilegiado y posibles complicidades internas.

Puntos Claves

• Sustracción nocturna sin señales de fuerza: El robo tuvo lugar durante la noche del miércoles en oficinas del sexto piso. Según el general de Carabineros Rodrigo Espinoza, “aparentemente no hay señas de fuerza” en el ingreso al recinto. Este detalle sugiere que el delincuente podría haber contado con información privilegiada o acceso previo.
• Cantidad de equipos robados y áreas afectadas: Se sustrajeron 18 computadores, incluyendo equipos de funcionarios clave como el subsecretario Víctor Orellana, personal técnico profesional y del área de comunicaciones. Las zonas afectadas reflejan una elección estratégica, probablemente con conocimiento de su contenido.
• Sospechoso captado por cámaras: Las grabaciones muestran a un hombre saliendo con mochilas y un bolso grande que contenían los computadores. Según el coronel Claudio Pavez, se está verificando si el sospechoso acreditó su identidad en recepción, lo que podría vincularlo directamente con el entorno de la subsecretaría.
• Investigación en curso: OS9 y Labocar de Carabineros investigan posibles fallas de seguridad. Se revisan imágenes desde el 31 de diciembre y no se descarta una conexión interna. Este ángulo incluye evaluar si empleados actuales o anteriores podrían haber facilitado información o acceso.
• Impacto en la confianza pública: La facilidad del robo y los antecedentes de incidentes similares en otras instituciones públicas dañan gravemente la percepción ciudadana. Como recordó el ministro (s) del Interior, Luis Cordero, este tipo de delitos no solo implica pérdidas materiales, sino el riesgo de exposición de información sensible que afecta la credibilidad del Estado.
• Declaraciones oficiales: El ministro (s) del Interior calificó el hecho como “complejo” y reiteró la gravedad de que “se puedan sustraer información relevante para los servicios públicos”. Mientras tanto, la Subsecretaría asegura que los procesos regulares, como la PAES y la asignación de gratuidad, no se verán afectados.
• Patrón preocupante de robos en instituciones públicas: Este no es un hecho aislado. En 2023, el Ministerio de Desarrollo Social y la Junaeb sufrieron robos similares, lo que expone una tendencia alarmante de vulnerabilidades en las reparticiones estatales. Estos episodios generan dudas sobre la eficacia de los protocolos de seguridad actuales.

El robo de computadores en la Subsecretaría de Educación Superior no es solo un ataque material, sino un golpe a la confianza en las instituciones públicas. Las aparentes fallas de seguridad y la posibilidad de complicidad interna exigen una respuesta enérgica y una revisión profunda de los protocolos de acceso y resguardo de información. Las autoridades deben actuar con determinación para evitar que este tipo de incidentes se repita y para restaurar la confianza ciudadana.