Filtraciones de aguas servidas en el Hospital San Borja: la ministra de Salud guarda silencio mientras anuncia avances en la construcción de un hospital en Linares
El Hospital San Borja, en Santiago, enfrenta una grave crisis debido a filtraciones de aguas servidas en la Unidad de Pacientes Críticos, lo que pone en peligro la salud de los pacientes y el personal de salud. Mientras tanto, la ministra de Salud, Ximena Aguilera, anunció con orgullo los avances en la construcción del nuevo hospital de Linares, sin hacer mención alguna a la crítica situación que vive el hospital de la capital, lo que ha generado indignación entre el personal médico y la comunidad.
Puntos clave:
- Denuncias desde 2020 sin respuestas satisfactorias: La jefa de la Unidad de Pacientes Críticos del Hospital San Borja, Dra. Francisca Ríos, denunció que desde 2020 existen filtraciones de aguas servidas en el recinto, las cuales representan un riesgo grave de electrocución, incendio y contaminación para los pacientes, especialmente los más vulnerables. A pesar de los reiterados llamados de atención, la situación no ha sido resuelta, y las autoridades no han proporcionado una solución efectiva.
- Pacientes inmunodeprimidos en peligro: Las filtraciones afectan a pacientes inmunosuprimidos que se encuentran en tratamientos delicados, como quimioterapia, o que padecen enfermedades que comprometen sus defensas. La doctora Viviana Vallejos, residente de la UCI, informó que de los 16 pacientes hospitalizados, nueve están inmunodeprimidos, lo que aumenta su vulnerabilidad frente a las condiciones insalubres de la unidad. El riesgo de infección bacteriana y otras complicaciones sigue siendo alto.
- Riesgo de incendios y filtraciones eléctricas: Uno de los aspectos más preocupantes de la denuncia es que las filtraciones provienen de los ductos eléctricos, lo que incrementa el riesgo de un incendio similar al ocurrido en 2021. Los médicos temen que las filtraciones generen una nueva tragedia, mientras que las autoridades del hospital se han limitado a atribuir el problema a la antigüedad del recinto sin tomar medidas urgentes.
- Anuncio de avances en la construcción del hospital de Linares: Mientras el Hospital San Borja enfrenta esta grave crisis, la ministra de Salud, Ximena Aguilera, visitó el nuevo Hospital de Linares, que ya presenta un avance del 26% en su construcción. Aguilera destacó la importancia de esta obra, que aumentará en un 50% la capacidad de camas del actual hospital de Linares y contará con modernas instalaciones. La construcción, que estuvo suspendida por la pandemia, fue retomada tras un acuerdo con la empresa a cargo y se estima que finalizará en 2028.
- Falta de mención a la crisis en el Hospital San Borja: A pesar de la gravedad de las denuncias realizadas por los médicos del Hospital San Borja, la ministra Aguilera no mencionó la situación durante su anuncio en Linares. Esto ha generado críticas sobre la indiferencia del Ministerio de Salud hacia los problemas urgentes de los hospitales ya existentes, particularmente aquellos que atienden a pacientes en estado crítico, como el San Borja, que enfrenta riesgos inminentes para la vida de sus pacientes.
- Acciones futuras para solucionar la crisis en San Borja: Ante la falta de soluciones, los médicos del Hospital San Borja, junto con el senador Juan Luis Castro y representantes del Colegio Médico, se reunirán el lunes con el Ministerio de Salud y la Dirección de Presupuestos. Exigen una intervención inmediata para resolver los problemas estructurales y de seguridad que afectan al hospital, advirtiendo que, de no mejorar la situación, se podría llegar al cierre de la Unidad de Cuidados Intensivos.
La grave situación que afecta al Hospital San Borja pone en riesgo la vida de los pacientes más vulnerables, mientras la indiferencia de las autoridades frente a esta crisis resulta alarmante. La ministra de Salud, Ximena Aguilera, ha priorizado el anuncio de avances en la construcción de un nuevo hospital en Linares, sin abordar el estado crítico del San Borja, lo que refleja una falta de empatía y urgencia ante problemas que deberían ser escandalosos para todos. Esta indiferencia contrasta con las necesidades inmediatas de un hospital que ya ha perdido vidas por condiciones insalubres y peligros estructurales. La atención mediática y política debe enfocarse en resolver esta crisis para garantizar la seguridad y dignidad de pacientes y profesionales en el Hospital San Borja.