CMPC: “Es imposible hacer proyectos en Chile”, declara su presidente
En el reciente encuentro empresarial organizado por Irade en Los Ángeles, región del Bío Bío, Luis Felipe Gazitúa, presidente de CMPC, declaró que es “imposible hacer proyectos en Chile”. Estas declaraciones surgieron en un panel titulado “¿Cómo avanzamos?”, con la participación del ministro de Economía, Nicolás Grau, y otros destacados empresarios y líderes.
Puntos Claves
- Contexto de las Declaraciones: En el panel, Gazitúa explicó que CMPC ha optado por desarrollar mega proyectos fuera de Chile, citando como ejemplo una gran inversión de celulosa en Brasil iniciada en mayo pasado.
- Razones Detrás de la Decisión: El presidente de CMPC destacó la percepción de que en otros países latinoamericanos, las autoridades públicas reconocen el papel crucial de la industria privada en el desarrollo económico, algo que, según él, se ha perdido en Chile.
- Dificultades en Chile: Gazitúa subrayó que iniciar un proyecto de inversión en Chile es inviable debido a los largos plazos necesarios para obtener permisos, ejemplificando con una fábrica de celulosa que podría demorar hasta 14 años en materializarse.
- Respuesta del Gobierno: El ministro de Economía, Nicolás Grau, admitió problemas históricos con la “permisología” en Chile, pero defendió la intención de mejorar el sistema sin reducir estándares.
- Reacciones Políticas: Las declaraciones de Gazitúa generaron diversas reacciones en el Congreso, donde diputados como Miguel Ángel Calisto y Sofía Cid abogaron por ofrecer garantías al sector privado y agilizar los trámites de permisos.
- Críticas de Mario Marcel: El ministro de Hacienda, Mario Marcel, criticó a Gazitúa, recordando el caso de colusión en el que CMPC estuvo involucrada y sugiriendo que se esperaría un mayor compromiso con el país por parte de la empresa.
Las declaraciones de Luis Felipe Gazitúa han abierto un debate sobre las dificultades para invertir en Chile, resaltando problemas de burocracia y permisología que afectan la competitividad del país. Las respuestas del gobierno y las reacciones del sector privado reflejan la complejidad de encontrar un equilibrio que fomente la inversión mientras se mantienen altos estándares regulatorios.