Una revisión a la trayectoria de Carmen Barros, ícono del arte chileno
La destacada y versátil artista chilena, Carmen Barros, falleció a los 98 años el 21 de diciembre, dejando un legado que abarcó música y teatro. Reconocida por sus roles en obras emblemáticas como “La pérgola de las flores” y “¡Esta señorita Trini!”, fue pionera en el escenario chileno.
Barros desafiaba la concepción tradicional del rol femenino al explorar diversas facetas como cantante, compositora, directora de teatro y diplomática. Desde su debut a los 19 años en radio hasta sus incursiones en jazz, música popular, ópera, televisión y cine, su versatilidad artística era impresionante.
En teatro, dejó una huella imborrable con roles memorables en obras como “Navidad en el circo”, “El diálogo de las Carmelitas” y “La balsa de la medusa”. Su interpretación de Carmela en “La pérgola de las flores” sigue siendo recordada por el público, aunque ella misma admitía los desafíos que enfrentó al encarnar ese personaje.
Su legado se vio recompensado con múltiples premios y reconocimientos, como la Figura Fundamental de la Música Chilena 2019 y la Orden al Mérito Artístico y Cultural Pablo Neruda 2020. Sin embargo, para ella, el mayor premio era el cariño y el reconocimiento del público que la veía como un verdadero milagro.
Además, su influencia se extendió a la creación de los Premios Carmen, honrando el trabajo en el teatro musical chileno. Colegas como Gabriela Aguilera, Ramón Núñez, Héctor Noguera y Amalá Saint-Pierre elogian su legado, describiéndola como una figura excepcional que trascendió el teatro y la enseñanza.
Carmen Barros fue una mujer que desafió los límites, dejando un legado que perdurará en la historia del arte chileno, siendo recordada no solo por su talento, sino por su humildad y dedicación al arte escénico.